En la obra de Antonio Muñoz Molina, «Como la sombra que se va», nos encontramos ante un ejercicio literario que desborda los límites convencionales de la narrativa para sumergirse en un complejo entramado de ficción, autoficción y metaficción. Este artículo pretende desentrañar las técnicas narrativas empleadas por el autor, así como la organización de los elementos que componen su estructura, ofreciendo al lector una visión profunda de una de las obras más emblemáticas del autor en las dos primeras décadas del siglo XXI.
La Conjunción de Técnicas Narrativas
Muñoz Molina utiliza una diversidad de técnicas narrativas que enriquecen su texto y desafían al lector a participar activamente en la construcción del significado de la obra. Entre estas técnicas destacan el desmontaje textual, la organización triangular de las historias, la doble identificación del texto ficcional y real, y una singular unicidad enunciativa narrativa que prescinde casi totalmente del diálogo directo.
El Desmontaje Textual
«Como la sombra que se va» se caracteriza por un desmontaje textual donde la estructura lineal se ve reemplazada por una disposición espacial de los elementos narrativos. Esta técnica, que otorga una sensación de atemporalidad y simultaneidad, requiere del lector una labor activa para ensamblar las piezas y construir una narrativa coherente. La ausencia de diálogos directos y el predominio de la narración y la digresión contribuyen a este efecto, creando una experiencia de lectura que es tanto desafiante como gratificante.
Organización Triangular y Metaficción
La novela se articula alrededor de tres ejes narrativos: la investigación sobre James Earl Ray, el proceso creativo del propio Muñoz Molina y su experiencia pasada en Lisboa. Esta estructura triangular no solo permite explorar distintas capas de realidad y ficción, sino que también refleja una profunda reflexión sobre el acto de escribir. La obra se convierte así en un espejo donde la realidad y la creación literaria se reflejan y cuestionan mutuamente, invitando al lector a reflexionar sobre los límites entre ambos.
La Ausencia de Diálogo Directo
Una de las decisiones estilísticas más llamativas de Muñoz Molina es la eliminación casi total del diálogo directo. Esta técnica enfatiza la interioridad de los personajes y la reflexión, poniendo el foco en la narrativa personal y la introspección. El resultado es una obra intensamente personal, donde las voces internas de los personajes y del propio autor se entrelazan sin intermediarios, creando un vínculo íntimo con el lector.
«Como la sombra que se va» es una obra que desafía las convenciones narrativas para ofrecer una experiencia literaria única. Antonio Muñoz Molina hace uso de una amplia gama de técnicas narrativas para explorar la complejidad de la memoria, la identidad y el proceso creativo. La organización de la ficción, la autoficción y la metaficción en esta novela no solo demuestra la habilidad literaria del autor, sino que también invita al lector a participar en un diálogo activo con el texto, explorando las profundidades de la narrativa contemporánea española.
Fuente: Técnicas narrativas y organización de la ficción, la autoficción y la metaficción en Como la sombra que se va de Antonio Muñoz Molina, José R. Valles Calatrava, Universidad de Almería (Revista de Literatura, 2022)